Como consecuencia de la querella presentada por parte de la Asociación Empresarial Veterinaria Española (CEVE Málaga), a través del bufete jurídico IFS ABOGADOS, contra una fisioterapeuta que prestaba sus servicios profesionales sobre animales, el juzgado de primera instancia e instrucción nº 3 de Coín (Málaga) ha estado instruyendo un caso de presunto delito de intrusismo profesional.
La querella se interpuso porque la fisioterapeuta había realizado actuaciones propias de la actividad de un veterinario sin estar autorizada para ello, como diagnósticos y tratamientos, ofreciendo en su domicilio y a través de visitas a domicilio los servicios de fisioterapeuta y osteópata animal.
Finalizada la fase de investigación, la Magistrada-Juez ha encontrado indicios de delito suficientes y dictado un auto de apertura de procedimiento contra la querellada, estándose a la espera de juicio oral.
Por primera vez en España un fisioterapeuta es investigado penalmente por un delito de intrusismo profesional debido a su actuación profesional sobre animales. En el auto, la Magistrada-Juez señala que «de todas las declaraciones testificales practicadas y del informe emitido por los investigadores privados, así como el informe emitido por el Colegio Oficial de Veterinarios se ha corroborado que la investigada sí ha realizado actividades propias de un veterinario sin estar habilitada para ello».
Esto supone un respaldo a las tesis defendidas por CEVE Málaga y el Ilustre Colegio de Veterinarios de Málaga, que se ha incorporado al procedimiento como acusación particular, según las cuales las competencias en fisioterapia animal corresponden en exclusiva a los veterinarios.